¿Cómo construir una relación de pareja sana?
Actualizado: 25 sept 2020
“Para pequeñas criaturas como nosotros, la inmensidad es soportable solo a través del amor.”
Carl Sagan (1934-1996) – Astrónomo estadounidense
El amor y las relaciones son temas inagotables. Se habla continuamente de qué hacer en una relación, cómo salvar una relación, qué hacer después de una ruptura, incluso de cuándo y cómo romper una relación.
De lo que casi nunca se habla es de cuándo, cómo y para qué se empieza una relación de pareja. Y es que para empezar una relación sana de pareja que, con el tiempo, se convierta en una relación plena y duradera, son necesarias tres cosas:
amarse
saber amar a otros (saber dar)
permitir a otros que nos amen (saber recibir)
Digamos que es como una mesa con tres patas: si una pata falta, la mesa caerá.
Amate para saber amar y recibir amor.
Y aquí es dónde empieza lo complicado y es que he escuchado muchas veces, quizá demasiadas, la pregunta “¿y cómo me amo a mi misma/mismo?” o esta otra “¿y no sería egoísmo?”.
No, no es egoísmo. Es aceptación. Todos tenemos defectos, por supuesto, pero también tenemos maravillosas cualidades y hemos de aceptar ambas caras de la misma moneda. Ser comprensivos y amables con nosotros mismos.
Ponernos condiciones como pueden ser “cuando consiga el peso ideal”, “cuando consiga el trabajo ideal”, “cuando consiga la pareja ideal” etc., nos bloquea, nos impide amarnos. Pero podemos cambiar, podemos asumir la responsabilidad, tomar el control y decidir que podemos amarnos tal como somos en este mismo momento. Es cuestión de elección. Elige empezar HOY, no mañana. Elimina las excusas ya que pueden seguir allí dentro de dos semanas, cinco meses o veinte años.
“Amarse a sí mismo es el comienzo de una aventura que dura toda la vida.”
Oscar Wilde (1854-1900) – Dramaturgo y novelista irlandés
Así pues, ¿por dónde empezar? Te diría que por escucharte. ¿Qué dialogo interno tienes? ¿Cómo te hablas? ¿Qué te dices? ¿Eres amable contigo misma/mismo cuando cometes un error? ¿Eres compasivo/compasiva? ¿Sabes perdonarte? ¿Cómo te tratas? – Cambia tu dialogo interno negativo por un dialogo interno positivo: compréndete (probablemente en ese momento, tu acción o conducta te parecía la más acertada o la única opción; no tenías la información suficiente, las herramientas internas necesarias etc.), acéptate (nadie es perfecto), perdónate (de corazón y luego corrige la situación), sé amable contigo misma/mismo (no te castigues), felicítate por tus logros, por muy pequeños que sean (te lo mereces).
Luego, aprende a gestionar tus emociones y utilizarlas para avanzar, para crecer y desarrollarte. Las emociones no son tus enemigas. Tienen información para ti y están allí para ayudarte.
Igualmente importante, es aprender a gestionar los sentimientos tóxicos como el victimismo (tu vida parece estar bajo el control de todo lo que ocurre en el exterior; toma el control de tu vida; confía en ti y en tus capacidades, habilidades, herramientas internas), el resentimiento o la culpa.
“Purifica tu corazón antes de permitir que el amor se asiente en él, ya que la miel más dulce se agria en un recipiente sucio.”
Pitágoras de Samos (582 AC – 497 AC) – Filósofo y matemático griego
Cuídate físicamente comiendo sano, haciendo deporte, descansando lo suficiente etc.
Aprende a comunicar con asertividad (aprende a decir “no”, aprende a pedir etc.).
Aprende a agradecer. Agradece la posibilidad de disfrutar, de saborear el riquísimo café que tienes delante, de poder admirar el magnífico atardecer, amanecer o cualquier cosa que te agrade. Disfruta y agradece las gotas de agua caliente mientras te estás duchando. Siente la satisfacción de haber finalizado lo que te has propuesto y siente el agradecimiento de haber podido hacerlo. Puedes sentirte agradecida/agradecido por muchísimas cosas CADA día. Aprende a verlas y a valorarlas. Y, por supuesto, sé agradecida/agradecido con los demás.
Y ahora, cobra sentido “ama a tu prójimo, como a ti mismo”. En este acto de amor y de respeto hacia el otro, te permites ser feliz tú y permites que el otro también lo sea.
Una vez hayas aprendido a amarte, sabrás amar a tu pareja y podrás entender y poner en práctica los siguientes 15 puntos:
Si empiezas una relación, empiézala para dar, para contribuir, no para recibir. Se trata de las expectativas que tienes al entrar en una relación. Si comienzas esperando que tu pareja vaya cubriendo, por ejemplo, tus necesidades de reconocimiento, de seguridad o si pretendes que esté contigo 24 horas de 24, dejando de lado su vida y su identidad, porque tú así lo haces (por no saber cómo estar contigo misma/mismo – miedo a la soledad), pues permíteme que te diga que necesitas volver a leer cómo amarse y ponerlo en práctica HOY.
Cada día siente el orgullo y el agradecimiento de tener a tu lado una persona tan maravillosa, fantástica, única, especial, extraordinaria y exprésalo.
NUNCA compares tu relación con las relaciones de los demás (ni para bien, ni para mal).
Recuerda: las sombras del pasado son solo eso: sombras. Vive el hoy, el aquí, el ahora. Ama HOY. No ayer. No mañana.
No cuestiones la identidad de tu pareja o la naturaleza de tu relación. Si hoy tenéis un problema, no quiere decir que la relación sea un problema.
No amenaces con romper la relación (NUNCA). Si lo haces, tu pareja se quedará en estado de vigilia y en el momento en el que solamente le parecerá que algo no va bien, su alarma se activará y dejará la relación antes de que lo puedas hacer tú (repito: aunque no exista tal intención por tu parte).
Si algo no da resultados, sal del bucle e inténtalo de otra manera, desde otra perspectiva.
Comprométete a mejorar continuamente la relación (comunicación, intimidad, confianza, seguridad, variedad, pasión etc.). Sé proactiva/proactivo. No esperes a que el otro lo haga. Hazlo tú.
Para los momentos de conflicto/ desacuerdo, estableced un código divertido que os haga reír y de este modo salir del estado emocional negativo. Más adelante, desde la tranquilidad y con asertividad, solucionad el conflicto. Eso fortalecerá la pareja.
Los rituales de pareja crean una fuerte conexión. Pueden ser por la mañana, antes de ir al trabajo, al volver del trabajo etc. ¡Que sean muchos y divertidos!
Escucha activamente, con atención plena a tu pareja. Que sienta que estás allí. (Consejo: apaga el móvil o déjalo en silencio en la otra habitación)
Prepara pequeñas sorpresas que los dos vais a disfrutar.
Pregunta a tu pareja qué necesita para sentirse amada. Y hazlo. Transfórmate en su fan nº1. Evidentemente, tú también tendrás que explicar que es lo que tú necesitas. Solamente así podrá hacerlo. Solamente así sabrá qué y cómo darlo. Permite que tu pareja también sea tu fan nº1.
Apoya, aprecia, agradece, admira, acepta a tu pareja tal como es. Celebrad vuestras similitudes (las más importantes a nivel principios y valores) y disfrutad de las diferencias. Paul Géraldy, poeta y dramaturgo francés, dijo sabiamente que “es necesario asemejarse un poco para comprenderse; pero hay que ser un poco diferentes para amarse.”.
ES MUCHO MÁS IMPORTANTE AMAR QUE LLEVAR LA RAZÓN.
“El amor consiste en sentir que el ser sagrado late dentro del ser querido.”
Platón (427 AC – 347 AC) – Filósofo griego
Ahora, sabiendo cómo amarte y cómo amar al otro, será fácil recibir el amor. En este punto, la pareja está construida sobre cimientos sólidos y seguirá creciendo y desarrollándose llegando a la plenitud, pues tal como afirmaba Antoine de Saint-Exupery, “amar no es mirarse el uno al otro; es mirar juntos en la misma dirección.”.
NOTA: Este artículo se publicó originalmente en el blog de Escuela de Inteligencia.
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